¿Cómo construir tu propia casa?
Construir una casa desde cero es la ambición de algunos. Tener un hogar que se adapte por completo a ti tiene todo tipo de ventajas, pero la autopromoción conforma todo un proceso que no podemos iniciar a la ligera. Hay que tomarse los costes con seriedad, planificar con cuidado y respetar la legalidad vigente. ¿Por dónde empezamos?
El diseño y el lugar adecuado
Antes de nada, es necesario que tengas plasmado en papel el plano de tu futuro hogar. Esto evitará que te equivoques a la hora de seleccionar el solar adecuado. El coste del terreno llega a suponer un 50 % de la inversión total, aunque es recomendable que no suponga más de un 35 %. Además, a la hora de planear cómo será tu casa, no dejes a un lado tus necesidades y las de tu familia.
Así, es recomendable trazar un presupuesto realista, desarrollar un planteamiento de tu futuro hogar y elegir la parcela que más se adapte a tus necesidades. Procura que esta tenga unos buenos accesos, con un espacio suficiente para desarrollar la construcción sin problemas y que cuente con unos servicios mínimos cercanos, como podría ser un centro sanitario, supermercados o colegios.
En cuanto al terreno, ten en cuenta las condiciones de edificabilidad, las cuales pueden cambiar de un municipio a otro. Por ejemplo, quizás no tengas permiso para talar determinados árboles de tu finca al estar protegidos o la altura y el estilo del edificio estén restringidos.
¿Qué hay del presupuesto?
Junto al terreno, el presupuesto es uno de los aspectos fundamentales en una autopromoción. Al fin y al cabo, limitará qué puedes hacer y qué no, desde un punto de vista económico. Es recomendable que te pongas en manos de profesionales para recibir una orientación lo más completa posible. No obstante, para que te hagas una idea, deberías prestar atención a ciertos gastos.
Por ejemplo, los ayuntamientos exigen visado del proyecto básico y del proyecto de ejecución, ambos expedidos por el colegio de arquitectos. También es de cumplimiento obligatorio contar con un arquitecto que dirija la obra y un aparejador para la dirección técnica. Estas son solo unas pocas obligaciones, hay más, y las nombradas alcanzan por sí solas unos gastos de varios miles de euros, por lo que debes establecer un presupuesto ajustado y tener en cuenta este tipo de gastos.
Legislación y papeleo
Por descontado, construir tu hogar debe hacerse respetando la legalidad vigente al respecto, en especial para evitar tirar por tierra toda la inversión realizada. Necesitarás una licencia de obra, un estudio de seguridad y salud, liquidar el impuesto de construcciones, la licencia de primera ocupación o la inscripción en el catastro. Olvidar alguno de estos trámites te traerá serios problemas. Vas a necesitar profesionales para cumplimentarlos y realizar los pagos aparejados. Incluso tendrás que emitir un certificado de final de obra una vez esta sea terminada.
En definitiva, a la hora de construir tu propio hogar, debes seguir estas indicaciones y no olvidar ninguno de los trámites a realizar. Calcula un presupuesto completo, ajustado a tus necesidades y lleva al día todo el papeleo que requiera la administración local.